Discapacidad auditiva y sus alternativas en el desarrollo de la comunicación


Por Zyanya Roesner

En México, el 22% de las personas presentan algún tipo de discapacidad auditiva, por lo que consideramos que informarnos sobre las distintas alternativas es responsabilidad de todos, para lograr crear conciencia, inclusión y oportunidades para todas las personas.

A continuación se presentan las tres alternativas predominantes en el país hasta el años 2023:

Lengua de Señas

La Lengua de Señas Mexicana (LSM), es la lengua utilizada por una parte de las personas con discapacidad auditiva en México. Esta lengua llega gracias a Eduardo Huet, quién fue un maestro francés que llegó a México para fundar la “Escuela Municipal de Sordomudos” en febrero de 1867, con primera sede en el Colegio de San Gregorio en la Ciudad de México. El 10 de junio del 2005, dentro de la Ley General de las Personas con Discapacidad se consideró parte del patrimonio lingüístico Nacional Mexicano.

Esta lengua se divide en dos estructuras: la dactilología y los ideogramas. La primera se dedica exclusivamente al deletreo del alfabeto con la mano dominante, mientras que la segunda, es la manera en la que se expresan palabras por medio de movimientos de una o ambas manos. Posee su propia sintaxis, gramática y léxico, se basa en una serie de signos y gestos con las manos, expresiones faciales y mirada intencionada que se utilizan con fines lingüísticos.

Cuando no exista o no se conozca el ideograma de una palabra puede usarse el alfabeto dactilológico para deletrear la palabra. Es importante remarcar que el alfabeto en la lengua de señas cambia según el país y la época histórica.

Ventajas:

  • Genera una vía de comunicación para las personas con discapacidad auditiva
  • Crea comunidad entre las personas que la utilizan
  • Fortalece la coordinación física y mental

Desventajas:

  • Condiciona la comunicación únicamente a las personas que practican la LSM
  • Cambia en cada país y tiene modificaciones regionales

Lectura labio facial

La lectura labiofacial (LLF) es utilizada para interpretar el mensaje oral que una persona normooyente transmite, por lo que es una herramienta de gran importancia en la comprensión del lenguaje cuando hay deficiencia auditiva. La importancia recae en la percepción visual de la emisión del sonido, esto complementa la información que una persona necesita para comprender un mensaje. Esta alternativa no se restringe solo al área bucal, también agudiza la percepción a los gestos, expresiones faciales y postura corporal para facilitar la decodificación del mensaje.

Esta técnica no asegura la comprensión del mensaje en su totalidad; muchos sonidos se articulan en un mismo punto, complicando el reconocimiento y diferenciación de cada uno. Asimismo, para poder utilizar esta herramienta, se requiere un gran conocimiento de vocabulario por parte de la persona con discapacidad auditiva, es decir, que tenga competencia lingüística suficiente o que posea una formación adecuada para adquirir dicha técnica.

Los requisitos en el empleo de la LLF para minimizar el rango de error, es la comunicación cara a cara, regular la velocidad del discurso, tener buena iluminación, tener distancia corta entre las personas. Desafortunadamente, aún con las condiciones óptimas, solo se consigue un 35% en la comprensión del mensaje en promedio.

Ventajas:

  • Es una vía para entender tu alrededor y cómo se comunican contigo
  • Es fácil de aprender

Desventajas:

  • No es un método de comunicación completo, es uno auxiliar
  • Puede tener discrepancias el mensaje y la interpretación al no tener un grado de
    precisión alto
  • Requiere de visualización de la boca
Imagen 1.1 Hay más formas de comunicarse que son más inclusivas para las personas con una discapacidad auditiva

Terapia auditiva – verbal

La Terapia Auditiva Verbal (TAV) reconoce a Daniel Ling, Doreen Pollack y Helen Beebe como algunos de sus pioneros más importantes, pues en febrero de 1978, crearon el Comité Internacional en Comunicación Auditiva-Verbal.

Esta terapia parte de la premisa de que 95% de los niños con problemas auditivos, cuentan con restos auditivos y de esta manera pueden desarrollar el lenguaje oral. La TAV busca generar un ambiente óptimo para el niño, instruyendo a las familias con técnicas para apoyar el proceso de lenguaje e incluir a los niños en tareas de la vida diaria.

Además del ambiente auditivo correcto en casa, las sesiones individuales deberán ajustarse al infante de acuerdo a diversos factores como: el estilo de aprendizaje, intereses, personalidad de los padres, edad y funcionamiento de cada niño, además de eliminar la mayor cantidad de distractores y proveer un ambiente acústico / lingüístico correcto.

La TAV es diagnóstica, esto significa que en cada sesión se realiza una evaluación del progreso del niño y su familia, para crear planes de trabajo específicos e integrales para las siguientes sesiones.

Los pasos y factores básicos para conocer si alguna persona es candidata a la TAV son:

  1. Diagnóstico a temprana edad
  2. Uso de prótesis auditiva en excelentes condiciones
  3. Contar con un coeficiente intelectual normal para la edad
  4. Participación activa de padres y familiares
  5. Apoyo de equipo profesional y capacitado

Ventajas:

  • Integra totalmente a las personas con discapacidad auditiva a la dinámica de
    comunicación común

Desventajas:

  • Se necesita un diagnóstico a temprana edad (0-3 años)
  • Requiere de una prótesis auditiva

En la actualidad, los avances tecnológicos y el trabajo de consciencia que hacemos en la sociedad genera viabilidad para todas las opciones. La mejor opción para una persona con discapacidad auditiva, depende de las necesidades específicas y condiciones que cada persona disponga.